Trabajando en el nuevo principio de tu empresa
En determinadas circunstancias, una empresa puede enfrentarse a dificultades para cumplir regularmente con sus obligaciones, lo que puede generar problemas crecientes. La ley establece que en tales casos se debe recurrir al Concurso de Acreedores para gestionar una salida ordenada y minimizar el daño a terceros, la empresa y sus responsables. No tomar estas medidas a tiempo puede acarrear responsabilidades legales y aumentar el daño. En nuestra experiencia, actuar con prontitud reduce significativamente las repercusiones negativas. El Concurso de Acreedores no significa el fin de una empresa; puede ser un nuevo comienzo. Sin embargo, su manejo es complejo y requiere de expertos capacitados para abordar eficazmente estas situaciones.
¿En qué situaciones se debe solicitar el Concurso de Acreedores?
Las circunstancias en que se podría o se debería acudir a un Concurso de Acreedores son
diversas, pero en términos generales las podríamos resumir en los siguientes grupos: